-"Eso, niña, no es más que una pesada carga de la cual debemos deshacernos".
-¿Cual es la función de esta cosa?
-"Sirve para mantenernos vivas...o al menos eso se nos ha dicho, la realidad es que a estas alturas ya no lo necesitamos".
-¿Si ya no nos sirve significa... que ya no estamos vivas?
-"No, te equivocas y a la vez tienes algo de razón...estamos vivas pero al mismo tiempo morimos....si logramos deshacernos de esta cosa...la situación cambiara y estaremos mejor que en cualquiera de los dos estados".
-Ahg!-Me queje.- ¿porque esta cosa punza?, me está lastimando.....
-"¿Ya te diste cuenta? ese dolor es el que me da la razón...".
-¿Pero por qué punza? ¿Por qué no deja de herirme?...comienza a pesar, este sentimiento dentro de mi pecho me sofoca...-.Apenas pude pronunciar las palabras de la ultima oración, lo que sea que fuera esa cosa, me estaba matando por dentro.
-"Punza...porque está herido, alguien se encargo de encajar pequeñas agujas en él".
-¿Él?
-"Así es, es algo así como un ser independiente que nos mantiene vivas...se alimenta de nosotras y nosotras nos alimentamos de él... pero últimamente esas heridas que alguien dejo en él...están disparando algo que no conocíamos y eso nos provoca el dolor que acabas de experimentar hace unos instantes."
El dolor se estaba volviendo insoportable, no provenía de una herida visible, ni siquiera estoy segura de si provenía de algún lado...solo dolía...,nada estaba sangrando pero percibía un olor a sal, era un liquido que brotaba de mis ojos, no, no era sangre estaba segura...no tenía ni idea de lo que era.
Entre en trance, sabía que esa otra entidad en todo momento estuvo hablando mientras yo seguía en ese estado de inconsciencia...sus palabras perdieron sentido conforme yo me adentraba mas en mi mente.
El dolor me estaba impidiendo responderle a lo que sea que estuviera diciendo, ni siquiera fui capaz de preguntar todo lo que tenía que saber a causa de la pesadez que sentía en mi pecho con cada minuto que pasaba, esos minutos que parecían horas...empezó a perder conciencia del tiempo...
En algún momento logre tomar el control sobre el control y logre balbucear algo.
-¿Cual es su nombre? Quiero saber qué es esto... esta vez no quiero el "para que sirve" sino ¿cómo puedo nombrarlo?...
Se quedo en silencio.
-Si no vas a decirme lo que es de forma más directa...por lo menos quiero saber ¿quien le hizo esto? ¿Quién lo dejo en este estado? y ¿porque me duele a mi sus danos?
En esta ocasión tomo una gran bocanada de aire y luego me contesto de mala gana:
-"Sus dolores son los tuyos porque así como yo, el también es parte de ti, la diferencia entre él y yo...yo fui creada por ti....y el nació contigo..."
-Está bien, eso responde a una de mis preguntas, pero aun espero la respuesta a mi otra pregunta...contéstame...-.
-"Eso....eso tú lo sabes mejor que yo... ¿No lo recuerdas?, fuiste tú quien le permitió la entrada y después...se aprovecho de ello para herir todo lo que pudo...le hizo daño a lo que te esta lastimando, a mí, a este mundo...a ti..."
¿A qué se refería con eso?, al parecer yo tenía la culpa de ese dolor que sentía... ¿Por qué no recordaba tan vital información?...
-"¿No recuerdas nada niña?"
-No, no recuerdo nada de lo que me dices...cuéntame-. Dije a regaña dientes.
-"Si lo has olvidado, es por nuestro sistema de autodefensa, es algo que no debes saber...al menos no ahora...¡¡debemos deshacernos de esta cosa!!".
No era la única que estaba perdiendo la paciencia, al parecer la entidad comenzaba a enfadarse conmigo por cambiar el tema inicial: Hacer que lo que me dolía desapareciera de ese mundo.
-Pero... ¿es necesario desecharlo?, quiero decir... ¿no puede curar con el tiempo?..
-"¡¡NO!! Ese pensamiento...ese estúpido pensamiento ¡¡¡fue el que llevo a que el intruso irrumpiera en este mundo!!! ¡¡¡Se supone que era el encargado de cuidarlo y en lugar de eso lo apuñalo, a él y a todo lo que vivía en este mundo!!! No permitas que el siga sufriendo, no es justo ni para él ni para nadie en este lugar... lo único que queda es terminar con su dolor..."
Esa última frase hizo que una punzada intensificara el dolor y el líquido salino comenzó a brotar con más intensidad que antes, un sentimiento extraño invadió mi pecho...
-Pero...tengo miedo...pero si no es posible que siga vivo...si ese es el caso, entonces encomiendo en tus manos la tarea de destruirlo...
-"No, yo no puedo tocarlo, lo quieras o no esa tarea es toda tuya"
Pase saliva en un intento de aclarar la garganta y poder hablar, el dolor me mataba una vez más.
-¿Que es lo que tengo que hacer?-. El sentimiento me aplastaba junto al dolor de antes, pero llego el punto en que haría lo que fuera con tal de aliviar mi sufrimiento. Puso en mi mano un objeto envuelto en un pequeño trozo de tela negro. Al desenvolverlo encontré una daga con el mango en forma de serpiente ascendente.
-¿Que es lo que tengo que hacer ahora? ¿Que se supone que debo cortar con esto?
-"Corta en el lugar del dolor..."-. Señalo con un dedo en la parte izquierda de mi pecho...
Tenía miedo, debía cortar mi propia carne para deshacerme del dolor, el ser del que habíamos estado hablando se encontraba en mi pecho, lastimado y lastimándome con cada movimiento que hacía.
Con las manos temblorosas sostuve la daga enfrente de mí, dudando de mis acciones y de la decisión que prácticamente me habían obligado a tomar, esa decisión que aparentemente yo busque elegir por mis acciones pasadas. Los temblores no dejaban ver el lento movimiento rectilíneo que trazaba la daga hacia su destino.
"Esto hará que me sienta mejor" "Ten valor, si haces esto el dolor desaparecerá" pensaba mientras trataba de sostener la daga con seguridad, voltee para ver a la entidad y ya no se encontraba cerca: se había ido. Como había dicho, "esa tarea era toda mía" y para asegurarse de que lo hiciera me dejo sola...
No entiendo...no sé que me dio el valor para hacerlo pero lo hice... la daga se hundió lenta y torpemente en mi pecho, la gire un par de veces dejando una forma cóncava en el lugar en que antes había estado el ser que me hacia sufrir...
La sangre salía a borbotones del hueco, el dolor se había ido...ya nunca volvería a sentir dolor...es mas...nunca volvería a sentir nada mas...nada...
La entidad o quizá deba decir: mi otro yo, se reía de manera incomprensible a la lejanía, en las sombras que rodeaban el lugar...
En el frio suelo, bañado en sangre e inerte se encontraba ese ser...era...era un corazón...mi corazón...
-㊋Atsumi㊋-
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